Cuando se trata de video digital, la demanda sigue superando a la oferta. Éste es un desafío para los anunciantes pero representa un infierno de oportunidades para los publishers.

El tiempo de consumo de anuncios en video fue el único segmento de publicidad digital que creció en el último año, según algunas estimaciones, conducido por una audiencia creciente y por el reconocimiento de que el retorno de inversión de los anuncios en video era relativamente alto.

Por eso, decidimos agrupar algunas consideraciones para los publishers que buscan capitalizar en la potente economía de anuncios en video (al menos hasta que la burbuja explote).

El vivo es la nueva tendencia

Cuando los eventos en vivo atraen grandes audiencias, es la oportunidad perfecta para que las marcas alcancen a un público comprometido y creen una experiencia publicitaria que pueda seguir viva aún después de pasado el evento.
Existen algunas consideraciones especiales respecto del uso de video en vivo. No se trata de algo hacia lo que los publishers puedan saltar sin asesoramiento previo. Mientras que, incluso Facebook está viviendo tiempos difíciles encauzando las preocupaciones morales y prácticas del medio, hay ciertas inquietudes alrededor de la seguridad del video en vivo.
Afortunadamente, los publishers pueden controlar el contexto de sus emisiones en vivo para proveer un ecosistema seguro en el que las marcas elegirían poner anuncios.

Pluralidad de forma

Así como crecieron las audiencias, también lo hicieron los tipos de video. Mientras que, la variedad de géneros de video ha incrementado (quién hubiese pensado, hace diez años, que los videos de unboxing o de contenidos cristianos estarían entre los más vistos en digital) también lo hicieron las formas que toman.
El video en 360 va a crecer como un segmento del video digital en los próximos años debido a que el nivel de consumidores de equipos de cámaras 360 y las herramientas de edición están cada vez más disponibles a nivel global. Las plataformas ya se están preparando para esto; Facebook y Vimeo anunciaron la semana pasada el lanzamiento de herramientas para productores de video en 360.

Las agencias son integrales

En relación al punto anterior, la promulgación de distintos formatos de video implica que, en muchos casos, incluso el mejor estudio de video fundado in-house no va a tener la experiencia para producir cualquier tipo de video.

En consecuencia, muchos publishers se están asociando con agencias externas y con estudios para que los ayuden a enfrentar esas dificultades. El ascenso (y leve descenso) de los multi-channel networks demuestran que los videos digitales exitosos suelen ser resultado de procesos colaborativos.

Monetizar directamente a través del video

De acuerdo con estudios recientes, la mayoría de los ingresos que los publishers generaron desde las plataformas, fueron desde el video. La mayoría proviene del pre-roll y de los anuncios in-stream en YouTube o en otras plataformas. Pero los pequeños publishers en particular, están eligiendo usar plataformas y servicios que les permitan monetizar sus audiencias directamente.
Existe una certeza: el video es un favorito de las audiencias digitales, y los publishers tienen una gran oportunidad para capitalizar en él si tienen en cuenta qué lugar ocupan en el ecosistema.

Síntesis de un artículo publicado en The Media Briefing.